Las gafas de sol no son sólo para el verano. Podía ser el título de una película de cine alternativo, pero lo bien cierto es que se trata de un consejo muy acertado que deberás de seguir. Tus ojos son igual o más vulnerables al sol en invierno. Vamos a darte una serie de consejos para que lo entiendas.
Primero de todo, es importante que sepas que, debido a la traslación de la Tierra, la posición del Sol es más baja y su ángulo varía, por lo que nuestros ojos están mucho más expuestos a las emisiones de luz ultravioleta. La exposición de nuestros ojos a los rayos del Sol puede degenerar en enfermedades oculares como las cataratas, por lo que es muy importante que siempre tengas a mano tus gafas de sol, sobre todo si vas a dar algún paseo.
Mito desmentido, y aquí viene otro. Ten muy presente que la luz solar no solo nos afecta en días claros. Las jornadas con un cielo nublado no deben hacerte bajar la guardia. Otro de los enemigos para nuestros ojos estos días es el viento o el frío, que pueden provocar tanto sequedad en tus ojos, como lagrimeo.
Tanto el frío como el viento son dos causas de uno de los problemas oculares más molestos en invierno, la sequedad ocular. Es fácil detectarlo. Si notas picor o quemazón, como cuando tienes la sensación de que se te ha metido algo en el ojo, son síntomas de sequedad.
Pero el viento no es el único causante de este problema en invierno. Con el frio, tanto en casa como en la oficina tendrás la calefacción puesta y también puedes sufrir este malestar. Muy atento a este problema, sobre todo si llevas lentillas. ¡Recuerda que siempre deben estar bien hidratadas!
Para evitar estas dolencias es aconsejable el uso de humidificadores. Si lo que usas para paliar el frío en tu casa es un radiador, puedes poner encima un recipiente con agua, reduciendo así la sequedad en el ambiente. El uso de colirios también puede ayudarte.
Invierno en la nieve
Si vas a la nieve, las gafas de sol se van a convertir en tus grandes aliadas. De hecho, van a ser tu escudo ante los rayos ultravioleta del sol, sobre todo si vas a esquiar este invierno. ¿Sabías que los rayos del Sol son más dañinos para tus ojos en la nieve que en la playa? Otro mito que se rompe.
Cuando la luz solar incide en la nieve fresca, nuestros ojos son capaces de recibir hasta un 80% del reflejo de los rayos mientras que, cuando estamos en la playa, solo reciben entre un 10 y un 25%, ya que la arena no tiene tanta fuerza de reflexión. Por eso es tan importante que protejas tu vista con unas gafas de sol, sobre todo si son polarizadas, pues reducen el reflejo en los ojos y, por supuesto, te protegen de agentes tan dañinos como el viento. Además, ten muy en cuenta que cada año que pase será peor para tu vista, ya que la incidencia de los rayos ultravioleta en ojos desprotegidos no se nota de manera inmediata, sino de forma acumulativa, cada año.
Por lo tanto, toma nota de estos consejos y ya sabes, ante cualquier problema de visión, en Clínica de la Retina Valencia te podremos ayudar. ')}