El agujero macular se caracteriza por pérdida de la visión central y distorsión en las imágenes en uno de los ojos. La distorsión se manifiesta como ondulación de las líneas rectas y los números o letras pueden saltar de línea. Otros síntomas que presentan los pacientes son una mancha gris central o una mancha ciega en la visión central y mayor dificultad para la lectura.
Generalmente esta patología se manifiesta de forma aguda de un día para otro, pero en ocasiones la pérdida visual es mas progresiva en semanas o meses. Algunos pacientes no se dan cuenta hasta el momento en que por algún motivo deben ocluir el ojo que no se encuentra afectado.
En fases iniciales de la enfermedad se detecta una lesión amarillenta en la fóvea, que es la parte de la retina que se encuentra en el centro de la mácula y es responsable de la visión de detalle y para la lectura. Cuando el agujero se ha consolidado, éste se puede visualizar allí.
Existen cuatro grados o estadios dentro del agujero macular, que van del menos al más grave.
Grado 1: Se detecta un desprendimiento de la zona foveal de la retina pero sin agujero retiniano completo.
Grado 2: Se detecta un agujero retiniano completo pequeño en la zona foveal.
Grado 3: Aumento del tamaño del agujero (a partir de 400 micras)
Grado 4: El agujero está asociado a un desprendimiento posterior del vítreo. El vítreo es la gelatina que se encuentra dentro del ojo.
Existen cuatro causas que pueden provocar este agujero macular. Las más comunes son las Idiopáticas. Estas, aparecen en pacientes sanos sin evidencia de otra enfermedad ocular. Es el tipo mas habitual de agujero macular y está relacionado con la edad.
Los pacientes con miopía magna (graduación por encima de 9 dioptrías) tienen un mayor riesgo de agujero macular debido a las características anatómicas del ojo miope. También se puede producir por inflamación crónica de la mácula: En casos con edema macular quístico crónico secundario a inflamación ocular , cirugías intraoculares previas , alteraciones vasculares de la retina… Por último en casos de traumatismos oculares.
Antes de resolver el agujero macular valorar el grado de catarata del paciente. En pacientes que presentan catarata se recomienda una cirugía combinada con extracción de la catarata y cirugía del agujero macular en un mismo procedimiento para evitar una segunda intervención más tarde en el tiempo.
La cirugía del agujero se realiza para mejorar la visión y la distorsión de la imagen en pacientes con alteración visual sintomática, evitar una progresiva pérdida visual que se produce a lo largo del tiempo.
La extracción de la catarata se realiza para mejorar la visión del paciente, evitar la necesidad de una segunda intervención por la progresión de la catarata más adelante en el tiempo, muy habitual en pacientes con algún grado de catarata y más de 60 años. La extracción de la catarata permite corregir cualquier error refractivo que presente el paciente.
Los pacientes con agujeros maculares grado 2, 3 y 4 generalmente precisan cirugía. Sin embargo, los pacientes con agujeros iniciales grado 1 que no precisan cirugía deben ser revisados periódicamente para valorar si hay progresión y los pacientes realizarán autocontroles en casa con la cuadrícula de amsler para determinar si hay cambios en la distorsión. Ellos, deben acudir a la visita antes de la fecha programada si existe disminución sintomática de la visión o incremento en la distorsión. En cada control se valorará si el paciente ha perdido visión o si ha aumentado la distorsión en la imagen y se realizará una OCT macular para valorar si ha habido progresión en el grado de agujero macular. ')}